Pico Heura – Serrella (1351 metros)
Domingo 20 de diciembre de 2009
Pincha en las fotos si quieres verlas más grandes.
Los Frares. Se sube por la canal que va directa a la V, pasando entre los frares. La cara norte de la Serrella esconde un sorprendente tesoro natural. Son las denominadas «Agulles o Frares» que son un conjunto de monolitos pétreos erosionados por el viento a lo largo del tiempo y que adoptan formas caprichosas que parecen moldeados por el hombre, por que parecen monjes. De ahí su nombre, Frares.
Pero antes de todo eso, todavía en el camino, pasamos junto a la Carrasca de la Tía Sofía. Un árbol singular cuya historia nos cuenta el panel informativo.
El recorrido transcurre entre bancales de olivos y poco a poco se va ganando altura.
La nevada ha sido grande y ha destrozado árboles.
Nos vamos acercando a las pendientes aunque nos hemos desviado hacia la derecha para contemplar de cerca un agujero en la roca que nos ha llamado la atención.
El camino empieza a desaparecer y ya se trata de subir recto hacia arriba por una pendiente que comienza a pronunciarse.
Ya avistamos el agujero en la roca que queríamos ver.
Curiosas formas.
Desde este punto nos desplazamos en travesía lateral hacia la izquierda para retomar la ruta inicial al collado en forma de V que nos llevará al Heura. Vamos pegaditos a los frares. Impresiona verlos de cerca. Por un momento cierras los ojos y te imaginas en otras montañas.
Las huellas delatan el paso de un habitante de la montaña.
Por fin se acaba la travesía lateral y enfilamos hacia el collado en forma de V. La nieve es puro polvo y ahora que hemos ganado altura, a cada paso que damos, nos hundimos en medio metro de nieve pisando directamente la pedrera que hay debajo. Un pasito p´alante y dos p´atrás. Esto empieza a ser cansino. Abriendo huella y retrocediendo casi más que avanzando.
Ésto me recuerda un poco al embudo de la Sagra.
El sol empieza a asomar. Estamos todo el rato en cara norte y su presencia se agradece.
Después de subir una pala final bastante inclinada y con mucha nieve acumulada que nos ha recordado lo jodio del noble arte de abrir huella nos asomamos al collado, ya con el sol bañándonos cálidamente. Esto parece los Piris. Es una estampa difícil de ver en Alicante.
Desde el collado salimos al camino que discurre por el precioso bosque del Pla de la Salvia. Al fondo está la cumbre de la Serrella. Pincha en la foto para ampliarla y si te fijas verás un refugio en la cima.
Ya casi estamos, el desnivel se ha acabado y solo nos queda disfrutar de este bosque inmaculado y solitario. Hemos acertado viniendo hoy aquí. La marabunta está en Aitana, nosotros solo nos hemos cruzado con 3 personas en todo el camino.
Un momento mágico, lo único que se oye es el viento atizando las ramas de los árboles, haciéndolas nevar al calor de un rayo furtivo de sol que se cuela entre ellas. Sólo por disfrutar y poder fotografiar este momento ya ha valido la pena la palicilla.
Esto es lo que se ve desde la cumbre del Heura.
En el centro de la imagen el Puig campana al fondo, sin nieve, y con el mar detrás.
Epílogo
No encuentro mejores palabras para este epílogo que parafrasear un texto que encontré en este magnífico blog
La ola perfecta.
La nieve en Alicante es como la ola perfecta para los surfistas, hay que aprovecharla. Justo cuando la televisión comienza a dramatizar, exagerar y confundir a los ciudadanos con las previsiones del tiempo, es el momento de salir. Cuanto más frío haga y mas nieve haya caído mejor.
No es una inocentada. Soy Reme intentando publicar un comentario por tercera vez.
Mi comentario empieza por ¡Gnynynynynynynynnn…! Es pura y sana envidia q no sé cómo expresar con las letras.
Aunq ya me lo contaste de camino a Aspe, ver las fotografías y leer lo q has escrito sobre el recorrido y los paisajes ha sido una delicia.
Al principio no entendí el título…Es verdad que también existe vuestra "ola perfecta": Para los q amáis las montañas hay días "mágicos" en los q una "suerte" d climas y d vida puede trasladarte a otro espacio y otro tiempo sin haberte alejado apenas d tu casa. Y me alegro por ti, porque hayas disfrutado de tu "ola". La verdad es q, tal y como lo cuentas, parece q ya está guardado en tu "cofre de tesoros de andar por la vida".
Respecto a las fotos, sabes q no soy una experta. Me gustan todas, y más tratándose d la "Terreta Blanca", pero hay algunasss…
La del camino nevado flanqueado por un árbol caído…Es como la incertidumbre…Desear recorrerlo, pero sin dejar huellas…Toda una tentación.
La de la nieve sin camino, con un árbol en pie y marcado de huellas de algún "habitante"
La q muestra el contraste: El desnivel de la umbría nevada y allá abajo, la base "inundada" por la luz.
Y la del bosque: La imagen de los árboles y ese "destello" d nieve atomizada es lo más parecido a mi sueño de Irati en invierno.
Felicidades por tu experiencia y agradecimiento por haberlo compartido con nosotros en tu blog.
Hola Uli!
Soy J. Toro, nos conocimos el sábado en el refugio de la Carihuela.
Le he estao echando un vistazo al report y me ha gustado,las fotos son magníficas. Enhorabuena.
Un saludo!
Hola, J. Toro. Gracias por pasarte y comentar. Menudo día de viento que nos tragamos el domingo.
Un placer compartir un rato con vosotros.
Saludos